Desde muy joven, Itzia de los Ángeles Ortiz Paredes tuvo el interés por la ingeniería, pero también sentía la necesidad de dedicarse al ámbito de la salud, ya que ayudar o cuidar a quienes sufren alguna enfermedad era -y sigue siendo- para ella una fuerte motivación.

Con esto en mente decidió estudiar ingeniería biomédica, una profesión en la que ambas pasiones se conjugan.

“La ingeniería biomédica me permite estar en ambos ámbitos, el poder aplicar todos los conocimientos de la ingeniería en busca de soluciones tecnológicas que apoyen a brindar el servicio de calidad que los pacientes exigen y esperan”, explica Itzia.

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Al inicio de su carrera, Itzia colaboró con una empresa externa que brindaba sus servicios a Hospital Faro del Mayab. Durante este tiempo tuvo la oportunidad de conocer el hospital y a CHRISTUS MUGUERZA y, tras seis meses, pudo integrarse de manera formal al equipo de ingeniería biomédica de Hospital Faro del Mayab.

La jornada laboral de Itzia inicia a partir de las 8:00 de la mañana con un recorrido por todas las áreas del hospital en el cual verifica que todo marche en orden. Entre sus principales funciones durante este recorrido se encuentra verificar que la temperatura y presiones del cuarto de máquinas sean las ideales para la operación de los equipos.

En su recorrido visita el área de imagen, urgencias, donde hace pruebas iniciales a la máquina de anestesia, el desfibrilador y el ventilador de traslado, ya que estos, menciona, son los equipos más críticos en el área. La última área a su cargo es la de terapia intensiva, la cual incluye adultos, pediátricos y neonatos.

Tras el recorrido, Itzia se ocupa de darle seguimiento a los pendientes que surjan durante el día, así como actualizar el inventario del hospital y la documentación de reportes de servicio. Asimismo, cuando es necesario participa en cirugías de alta complejidad que requieran el uso de microscopio.

“Nuestro apoyo en el área es importante ya que somos el primer contacto en caso de que algún equipo médico presente una falla antes o durante el procedimiento”, explica.

Además de su trabajo de rutina, Itzia también participa en la capacitación al personal médico y de enfermería acerca del uso de los equipos, así como evaluar las necesidades de hospital.

A un año y medio de laborar en Hospital Faro del Mayab, considera que el mayor reto ha sido lograr que su profesión sea reconocida como una pieza importante del cuidado al paciente.

“Creo que el mayor reto ha sido poder incorporar nuestro trabajo y funciones como parte importante del cuidado del paciente, el hacer ver que es necesario un equipo multidisciplinario para que logremos juntos el objetivo de brindar una atención de calidad, al mismo tiempo que cuidamos tanto a los pacientes como a los usuarios de los equipos médicos”, explica Itzia.

Para Itzia su trabajo le provoca una gran satisfacción, la cual comparte con personal médico y de enfermería y es motivo de esa alegría de contribuir a que los pacientes reciban una atención de calidad y recuperen su salud.

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“Como biomédicos estamos “tras bambalinas” en el día a día, pero al final, compartimos la misma satisfacción con nuestros compañeros médicos y enfermeros que están al frente del cuidado del paciente al ver que un estudio, procedimiento o cualquier atención brindada a nuestros pacientes se hace de manera correcta”, expresa.

En el Día Mundial de la Ingeniería Clínica, Itzia envía un mensaje de felicitación a los ingenieros que se desempeñan en las distintas subespecialidades de la biomédica y que, día con día, promueven el cuidado del paciente y el reconocimiento a su profesión.

“Antes que nada, felicitar a todos los ingenieros tanto clínicos como biomédicos que día a día apoyan y promueven el cuidado del paciente desde sus diferentes áreas de especialidad, reconocer a todos aquellos que se dedican a la investigación, a la ingeniería en rehabilitación, a la bioinformática, la telemedicina, y el resto de las ramas que posee nuestra carrera; cada día somos más los que formamos parte de este equipo y que estamos en busca del mismo objetivo, me siento muy orgullosa de ser ingeniera biomédica y sobre todo de pertenecer a la familia CHRISTUS MUGUERZA”, expresa.