Nuestra Colaboradora Nora Ivonne Almodóvar Orta, coordinadora de Enfermería en Hospital Del Parque, está próxima a cumplir 43 años de antigüedad laboral, lo cual la convierte en una de las Colaboradoras con más años en CHRISTUS MUGUERZA.

Nora nos cuenta que desde muy niña sintió ese deseo por cuidar y ayudar a los demás, recuerda que cuando era pequeña jugaba a ser enfermera, hasta que tiempo después estos juegos pasaron a la realidad pues, con el apoyo de su familia, logró estudiar la carrera de enfermería.

“Fui creciendo y también fue creciendo ese deseo por estudiar enfermería, con la ayuda de mi familia se me brindó la oportunidad de realizar este sueño, el cual me ha dejado una gran enseñanza a lo largo de mi vida”, relató Nora.

Siendo todavía estudiante de enfermería, Nora realizó su servicio social en la, hasta entonces llamada, Clínica del Parque. Su dedicación y esfuerzo la llevaron a trabajar formalmente en esta institución y, en 2005, vivir la fusión de la Clínica del Parque con CHRISTUS MUGUERZA.

“Me tocó la transición, cuando (Clínica del Parque) se unió al grupo, lo cual fue algo nuevo para mí. He visto como ha crecido, tal como en las familias, cuando llegan nuevos miembros.

“Estábamos escépticos al cambio, pero he visto los cambios positivos, los cuales han sido muchos como en certificaciones, talleres y poder llegar a más gente con las fundaciones y las campañas”, explicó Nora.

Así fue como Nora inició su historia en CHRISTUS MUGUERZA, es aquí donde cada día que pasa disfruta más de su trabajo y de esa gratitud que los pacientes le manifiestan. Para Nora, ser enfermera va más allá de cumplir con un turno, pues también implica dar a los pacientes la fortaleza que necesitan en momentos difíciles.

“El ser enfermera no es sólo aplicar medicamentos y realizar protocolos, es también acompañamiento y fortaleza para el paciente y familiares sea cual sea el diagnóstico y el saber que ellos sienten que están en las manos adecuadas y que podemos contestar sus inquietudes”.

Además de su experiencia profesional, Nora ha enaltecido su calidad humana gracias a cursos y diplomados que le han permitido hacer un alto en sus actividades laborales para conocerse mejor y fortalecer su espíritu.

“Aunque muchas de las enseñanzas que tenemos como enfermeras y las herramientas adquiridas a lo largo de la vida laboral se aplican en la vida cotidiana con la familia, en la parte de la espiritualidad como los talleres Desarrollo de Liderazgo en el Ministerio, Enfermería con Amor y otros tantos talleres me han mostrado esa parte de mí en la que casi nunca nos detenemos a ver y en lo cual me ha ayudado a crecer como persona y como ser humano”, expresó.

Hoy, Nora ya no es aquella niña que jugaba a ser enfermera, es una mujer que al voltear a su pasado se siente satisfecha de haber seguido su sueño y sumamente orgullosa de lo que ha logrado en CHRISTUS MUGUERZA, un lugar en donde, sin pensarlo, le gustaría regresar.

“En todo este tiempo son tantas las experiencias e historias de las que sin querer he formado parte de la vida de pacientes, familiares y amigos. El amor que ellos me demuestran, el saber que con el paso de los años no disminuye, sino al contrario, crece ese amor y que reconozcan mi esfuerzo con un abrazo, una sonrisa o incluso esos momentos de silencio que en ocasiones dicen tanto para mí, ese es el tesoro más grande que guardo”.