Ser padres, constituye la labor más exigente del mundo y es que no se recibe un entrenamiento formal para poder asumirla, por lo que es común que cuando las cosas se tornen difíciles con nuestros hijos, como padres tendemos a culparnos y sentirnos incapaces.

Tal sucede cuando hablamos de educar a nuestros hijos en autonomía: crear hábitos saludables y mantenerlos puede llegar a parecer todo un reto, sin embargo, es posible.

Si nuestros hijos generan hábitos saludables (el autocuidado, la alimentación, actividad física o el cumplimiento con tareas escolares) favorece a la adquisición de confianza y seguridad en ellos mismos y nosotros en ellos.

En primer lugar, es importante saber que los hábitos se aprenden. Esto quiere decir que un hábito se forma como el resultado de una acción que se repite una y otra vez y que es reforzada por una consecuencia positiva, de tal forma que se repitan las suficientes veces como para que el cerebro cree las conexiones necesarias para que aprenda estas conductas.

Entonces, la clave para establecer un hábito es la repetición.

La mayoría de los niños responden muy bien con rutinas, después, lo recomendable es que estas rutinas se puedan realizar a través de las actividades cotidianas.

Es importante que como padres tengamos en cuenta los siguientes aspectos:

  • Definir los hábitos que queremos que los hijos aprendan: cómo hacerlo, cuándo hacerlo y dónde practicarlos.
  • Organizar los pasos o consecuencias a seguir para su adecuada ejecución y practica constante en la vida diaria.
  • Dar a conocer la importancia y las ventajas de su práctica por parte de los niños (as) y la familia.

A continuación, te comparto estos sencillos pasos que te pueden ayudar en el hogar para establecer hábitos.

  1. Evitar ser autoritarios: Dar órdenes, castigarles o gritarles no les ayuda a asumir sus responsabilidades.
  2. Decidir qué le vamos a enseñar y cuándo:
  • Lo primero es decidir qué le vamos a enseñar
  • Enseñar algo adecuado a su edad, para esto te comparto la siguiente tabla Montessori de posibles hábitos que pueden aprender tus hijos en casa, de acuerdo a su edad.

Estos son los posibles hábitos que tus hijos pueden aprender de acuerdo a tu edad.

  • Hacerlo siempre y en todo lugar: todos los días.
  • En familia ponerse de acuerdo: no se vale, “con papá tengo que hacerlo, con mamá no”.
  • Preparar lo necesario: si le vamos a enseñar hábitos de higiene personal, tener preparado un lugar adecuado para su cepillo y pasta dental, su toalla, jabón, etc.
  1. Explicarle qué tiene que hacer y cómo:
  • Hay que explicar de manera clara y concreta qué es lo que queremos que haga, dándole la seguridad.

Por ejemplo: “eres un chico mayor, hoy te vas a lavar la cabeza tu sólo, sé que lo vas hacer muy bien”.

  • Enséñale, a través de la imitación, mientras tú le modelas cómo hacerlo.
  • Invítale a usar autoinstrucciones: “primero me mojo bien la cabeza, después me pongo un poco de champú en la mano”                                             

4. Practicar:

  • Es importante darles muchas oportunidades de práctica.
  • Recordarle los pasos que tiene que hacer.
  • Elogiarle los avances o logros del hábito.
  • Poco a poco disminuir la ayuda y recordatorios.

 5. Supervisar:

  • Revisar cómo va realizando paso por paso, felicitar y motivarlo.

Hábitos saludables

Para introducir hábitos saludables y duraderos, será conveniente que nosotros como padres seamos el modelo.

Ha sido demostrado que los niños presentan una mayor predisposición a consumir alimentos saludables y a llevar una vida activa si tienen el ejemplo de sus padres y de otros miembros de la familia.

En hábitos específicos podemos contribuir de la siguiente manera:

 Alimentación

  • Comer con la familia reunida, utilizando estos ratos para platicar y compartir experiencias.
  • Durante la etapa escolar y adolescencia, el niño deberá conocer los alimentos y aprender a comer de todo.
  • Evitar que los niños coman delante de la televisión.

Actividad física

  • Planificar horarios para: hacer sus tareas, pasear, montar bici, ir al parque o simplemente salir al parque a jugar.
  • Limitar la cantidad de tiempo que nuestros hijos pasan frente al televisor o videoconsolas y ofrecer actividades que puedan realizar en conjunto (como jugar futbol, ir a caminar).

Sueño

  • Evita las actividades intensas antes de irse a la cama (como jugar con video juegos, ver la TV) y bebidas con cafeína, té y chocolate.
  • Acostumbrar a tus hijos acostarse a la misma hora todos los días, puede ser leyendo un libro o contando una historia o experiencia.
  • Evitar tener un televisor o video juego en la habitación.

Higiene

  • Acostumbra a tus hijos a lavarse las manos, antes de tomar alimentos y después de haber ido al cuarto de baño.
  • Propón horarios para el lavado de dientes y de la ducha.

Pon en práctica estos pasos, recordando que cada uno de nuestros hijos aprende de diferente manera y que la clave es la repetición, por lo que es importante ser pacientes y constantes.

Información acerca del autor

Danae Morales Ponce forma parte del grupo de psicologos que dan orientación a Colaboradores de CHRISTUS MUGUERZA como parte del Programa de Atención y Escucha (PAE).