Con 43 años de edad, Jorge Álvarez Barqueiro fue diagnósticado con COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo Coronavirus SARS-CoV-02 y la cual lo llevó requerir de oxigenación.
Padecer obesidad e hipertensión, hizo que Jorge fuera más vulnerable a esta enfermedad. Tras recibir un desesperanzador diagnostico en el que le dijeron que probablemente no pasaría una noche más, Jorge llegó a CHRISTUS MUGUERZA Hospital Reynosa.
Al ingresar al hospital, el nivel de oxígeno de Jorge era de un 72%, por lo que de inmediato fue llevado al área COVID de hospital, donde se le proporcionó oxígeno. Pese a su bajo nivel de oxígeno, Jorge no necesitó de ventilación mecánica.
“Ingresé el día 26 de junio en un estado crítico, en el cual venía muy mal, pero gracias a Dios y a los cuidados de los doctores y enfermeras me pude poner bien”, expresó Jorge.
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Desde ese día, el caso de Jorge fue tratado por los doctores Jorge Alain Mayorga y Alberto Sánchez. A su vez, por el personal de enfermería conformado por Gerardo Ayala; Mayte Ibáñez; Isabel Urbina; Luz Correa; Darly Sánchez; Xeny Espinoza; Martha Labanzat; Fernanda Cuéllar; David López.
Para Jorge, superar el COVID-19 fue sumamente difícil, una situación que lo llevó, incluso, a perder 30 kilos mientras estaba en el hospital. Aunque su recuperación fue lenta debido a que sentía temor de dejar el oxígeno, tras 35 días hospitalizado, Jorge fue dado de alta. Momentos antes de abandonar el hospital agradeció al personal médico, quien estuvo a su cuidado.
“El trato de ellos (médicos y personal de enfermería) fue muy bueno, del 1 al 10 ellos tienen un 10, recibí un muy buen trato de todos. Yo me voy muy agradecido de este lugar que para mí es lo mejor y una experiencia más en mi vida”, comentó Jorge.
Hoy, tras esta esperanza que ha fortalecido su esperanza, Jorge está listo para disfrutar y valorar esta segunda oportunidad de vida al lado de su familia.
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