Tras poco más de cuatro meses hospitalizado a causa de la enfermedad de COVID-19, Alexander Bazán, de 30 años, regresó a casa con una historia con la que busca inspirar a más personas a disfrutar conscientemente de la vida.
En marzo de 2021 Alexander contrajo el Coronavirus SARS-CoV-02. Al presentar síntomas fue atendido en un hospital de Tijuana, la ciudad de donde es originario. Durante el mes de mayo, cuando la salud de Alexander empeoró, sus familiares tomaron la decisión de trasladarlo a CHRISTUS MUGUERZA Hospital Alta Especialidad, en Nuevo León.
Cuando Alexander llegó a Hospital Alta Especialidad, los médicos decidieron iniciar con ECMO, (Oxigenación con Membrana Extracorpórea), una terapia de soporte vital que sustituye las funciones de los pulmones. Alexander permaneció 129 días bajo esta terapia, lo cual permitió que sus pulmones tuvieran una recuperación lenta, pero constante.
El 17 de agosto de 2021, tras una serie de estudios que permitieron detectar la mejoría en sus pulmones, el equipo de médicos logró retirar la terapia ECMO de Alexander.
Alexander reconoce que estar bajo la terapia de ECMO lo llevó a experimentar una fuerte “montaña rusa de emociones” en la que aprendió a valorar la vida y a reconocerle su fragilidad.
“A veces estaba enojado, a veces estaba triste, a veces estaba eufórico. Hubo de todo, fue una montaña rusa de emociones esto de ECMO. Sí es un viacrucis muy traumático, pero que vale la pena y que hay muchos regalos ocultos de valorar la vida, del por qué tuve que pasar por este proceso para entender que somos frágiles como seres humanos y que la vida podemos tenerla un día y al otro día ya no estar en este plano terrenal y que hay que vivir con intensidad todos nuestros momentos de la vida”, expreso.
El 1 de octubre, entre música de mariachi y aplausos del personal médico y de enfermería que lo cuidó por más de cuatro meses, Alexander se despidió de Hospital Alta Especialidad y, aunque aún depende de oxígeno medicinal, su amor por la vida en tan renovado que nada le detendrá en su recuperación.
La Terapia de Soporte Vital, ECMO, también puede emplearse en recién nacidos y en niños que padezcan enfermedades que van desde neumonías virales y bacterianas hasta el Síndrome de Dificultad Respiratoria Aguda (SDRA), así como cardiopatías congénitas de alta complejidad.
Frente a la pandemia de COVID-19, ECMO ha sido de gran ayuda para pacientes que enfrentan casos graves de la enfermedad, y que requieren de esta terapia cuando equipos como concentradores de alto flujo y ventiladores mecánicos ya no son suficientes para el paciente. En septiembre de 2020, en Hospital Alta Especialidad realizamos el primer trasplante pulmonar bilateral a un sobreviviente de COVID-19, marcando un hito en la historia de la medicina en México y en el uso de esta terapia como puente para trasplantes de órganos.
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