Esto, lo saben muy bien Socorro, Alejandra, Karen y Diego quienes forman parte del grupo de DOYtores de CHRISTUS MUGUERZA. Desde 2004, este grupo se dedica a llevar alegría a los pacientes. Actualmente, está conformado por 30 Colaboradores, todos ellos con la bata bien puesta y lista para visitar a los niños y adultos que se encuentran hospitalizados.
Socorro Martínez, Coquito, como le dicen sus amigos, ha sido testigo de cómo nuestros Colaboradores se sienten interesados en ser DOYtores, una de ellas es Alejandra Elizondo, jefa del área de Misión y Valores, quien desde hace poco más de dos años le da vida a la DOYtora ‘Moñito’.
“Me decidí, porque para mí, una de mis metas en la vida es ser feliz, pero también ayudar a otros a hacerlo para poder trascender juntos y creo que ésta pues es una forma o es un grupo en el que puedo cambiar la vida de los demás y también cambiar la mía”, expresó Alejandra.
Diego Estrada le da vida al DOYtor ‘Yeyo’. El es becario en el área de Responsabilidad Social y esta oportunidad, además de prepararlo para su futuro profesional, le ha recordado la importancia de estar cerca y ser compasivo con las demás personas.
“Lo que más me recuerda es lo importante de ser cercano con las personas, escuchar sus problemas, estar ahí, aunque nosotros no podamos quizá cuidarlos, no podamos estar todo el tiempo con ellos, ese ratito de quitarles un poquito la carga a la familia, a los pacientes es lo que le da sentido a este proyecto y es padrísimo la verdad”, comentó Diego.
Karen Chapa, asistente administrativo en el departamento de Investigación y Educación en Salud, lleva cuatro años como parte del grupo de DOYtores. Para ella, ser la DOYtora ‘Sonrisa’ le ha permitido vivir grandes satisfacciones a través del apoyo que brinda a los pacientes.
“La verdad este voluntariado te deja muchas satisfacciones, te llena. Yo creo que es el lado sensible, que no se atreven a experimentar por miedo o por no saber que vaya a pasar. Simplemente es tú desearlo, tú sentirlo y dar lo que tú tienes, a veces, al paciente con una sonrisa, con un hola, con un abrazo, le es más que suficiente”, expresó Karen.
Experiencias que se quedan en el corazón
Muchas son las experiencias que este grupo de Colaboradores han tenido como DOYtores, sin embargo, hay algunas que han dejado huella en ellos, llevándolos a crecer como personas.
Coquito le da vida a la DOYtora ‘Omegy’ y gracias a ello ha vivido bonitas experiencias, entre ellas la de presenciar la mejoría de una bebé de tan sólo 8 meses de vida, a quien visitaron, y al verlos caracterizados de sus personajes, la bebé empezó a sonreír y balbucear, algo que no había hecho en meses.
“Fue algo tan emotivo para las enfermeras y para nosotros presenciar eso y saber que estábamos haciendo algo muy padre para la bebé”, expresó Coquito.
Alejandra también ha tenido bonitas experiencias, gracias a la DOYtora ‘Moñito’, entre ellas se encuentra recibir el agradecimiento no sólo de los pacientes a quienes visitan, sino también de sus familiares.
“Cada visita que tenemos es un regalo, pero, la mayor satisfacción es que conozco gente increíble que se convierte en maestros de vida para mí y también el transformar esos momentos difíciles, en risas, en abrazos, en palabras de agradecimiento, yo creo que irme a casa sabiendo que fui parte de eso es la mejor satisfacción para mí”, mencionó.
Dentro de las actividades de los DOYtores también está el acompañar a los pacientes que son atendidos durante las diferentes jornadas quirúrgicas celebradas en los hospitales a donde acuden y motivan a los pacientes a continuar con su recuperación.
A 15 años del nacimiento de los DOYtores, Coquito, Alejandra, Karen y Diego están muy contentos de ser parte de este proyecto que le ha llevado sonrisas y energía a cientos de pacientes.
Conoce más de nuestros DOYtores en el siguiente video: