Luego de descubrir que su verdadera pasión era ayudar a los demás y dejarse guiar por su sentido humanitario, Guadalupe Cantú Villalobos decidió estudiar la carrera de Trabajo Social. Después de egresar, emprendió la búsqueda de un empleo en el que pudiera hacer lo que le gusta: ayudar a quienes más lo necesitan.

Lupita, como le dicen sus compañeros, recuerda cómo fue su proceso de selección para ingresar como Colaboradora en el área de Trabajo Social de la Clínica Adelaida Lafón Fomerrey 35.

“Fue por casualidad y perseverancia. Casualidad porque dejé papelería aquí en Fundación Adelaida Lafón y después hice mis trámites para el Centro de Desarrollo Profesional (CDP). Fui insistente y estuve al tanto para mis entrevistas aquí en Lafón, hasta que me dieron la noticia y me preguntaron si quería pertenecer a CHRISTUS MUGUERZA”, relató.

Fue así como encontró algo más que un empleo, una segunda familia en la Fundación Adelaida Lafón en CHRISTUS MUGUERZA, a la que hoy califica como una de sus principales inspiraciones para solucionar los problemas que enfrentan las personas.

Me inspiró a ser ejemplo para muchas personas a quienes he podido dar una solución a su problemática, tal vez con el simple hecho de escuchar a la gente con su problema.

Hoy, a siete años de pertenecer a esta gran familia, Lupita menciona que para ella sus actividades en la Clínica Adelaida Lafón Fomerrey 35 le provocan una gran satisfacción, ya que la certeza de saber que es una pieza clave para mejorar la calidad de vida de los más vulnerables es reconfortante.

“Estoy muy contenta por los logros que he tenido a lo largo de mi estancia en la Lafón (…) Las personas se sienten mejor al tener a alguien que las escuche y una cualidad del Trabajo Social es el saber escuchar y lo más importante es el dar una solución a su problemática y orientación a lo que requiera su familia”, narró.

Guadalupe aún no sabe si fue coincidencia, perseverancia o un golpe de suerte haber llegado a la Clínica Adelaida Lafón Fomerrey 35, pero de lo que sí está segura es de que volvería a ser parte de esta gran familia, pues aquí, más que sus labores, logra hacer lo que Jesucristo: llevar la palabra de la salud a las comunidades.

“Mi inspiración mayor es Jesús quien anduvo dando la palabra de Dios, pero yo doy la palabra a la salud”, expresó.