Ante la contingencia sanitaria de COVID-19, la felicidad de Brenda Rodríguez de la Rosa dio paso a una gran incertidumbre al no saber dónde nacería su hija, dado que la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social donde ella recibía atención, atendía casos de COVID-19.
Para ella, lo más importante era no exponer a su hija, así que realizó el trámite necesario para ser parte del acuerdo nacional «Todos Juntos contra el COVID-19».
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“Asistí a mi unidad médica y ahí me explicaron sobre el convenio que existía, posteriormente, me dirigí con mi médico familiar, quien me mandó a coordinación a pedir un documento que se llama referencia contra referencia. Hablé al IMSS para que ellos me asignaran a un hospital particular y así fue”, explicó Brenda.
Gracias al seguimiento de todo este proceso, Brenda fue referida a CHRISTUS MUGUERZA Hospital Reynosa. El día del nacimiento de su hija, a Brenda se le practicó una cesárea, en la cual, cuenta, recibió un gran apoyo por parte del equipo médico.
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“Sinceramente me brindaron una excelente atención tanto mi ginecólogo como el pediatra. Todo el equipo de doctores que estuvieron en la operación. Todos me trataron muy bien, las señoritas estuvieron al pendiente mío y de mi niña. Nos llevamos una buena experiencia dentro de lo malo que existe (la pandemia de COVID-19), pero gracias a Dios tuvimos esta dicha y esta bendición de haber resultado de este convenio”, expresó Brenda.
Hoy, Brenda disfruta de tener a su hija entre sus brazos, pero, sobre todo, de saber que tanto ella como su hija están sanas y al lado de su familia.
“Gracias a Dios tuve esa dicha y esa oportunidad de no exponer a mi niña bajo esta pandemia que nos encontramos y pues todo salió muy bien”, comentó Brenda.
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